Garbanzos con Bacalao: Una Tapa con Sabor a Tradición

Si hay un plato que representa la esencia de la Cuaresma en Sevilla, ese es sin duda los garbanzos con bacalao.

Esta tapa, humilde pero llena de sabor, combina la suavidad de los garbanzos con el inconfundible toque del bacalao desmigado, todo ligado en un guiso especiado y reconfortante.

La tradición de este plato se remonta a tiempos en los que la religión marcaba la alimentación y, durante la Cuaresma, el consumo de carne estaba restringido.

El bacalao, al ser un pescado fácil de conservar en salazón, se convirtió en la alternativa perfecta y, con el paso del tiempo, en un símbolo gastronómico de estas fechas.

Hoy, en nuestro bar, seguimos manteniendo viva esta receta, sirviéndola como tapa en un cuenco de barro, acompañada de un buen vino o una cerveza bien fría. Porque más que un plato, es un pedazo de historia que nos une a nuestras raíces.

¿Te animas a probarla? ¡Te esperamos en la barra para disfrutar juntos de la auténtica cocina sevillana!